¿Cómo promover la inclusión educativa de la niñez migrante?

Junio 26, 2024

 

 

México, como punto de convergencia de una gran diversidad de flujos migratorios internos e internacionales, alberga a numerosas niñas y niños migrantes en edad de cursar la educación básica. En el caso de la migración interna, se trata de hijas e hijos de jornaleros que se desplazan de su lugar de origen para realizar labores agrícolas en distintas temporadas. En cuanto a la migración internacional, son niñas y niños que regresan de Estados Unidos y aquéllos que provienen de otros países, especialmente de Centroamérica, en su tránsito por México y en menor medida aquéllos que sus familias buscan establecerse permanentemente en el país.

 

Estos fenómenos migratorios, presentes de forma generalizada a lo largo y ancho del país, conllevan un desafío para las escuelas que ofrecen servicios regulares de educación básica, toda vez que el Estado mexicano tiene la responsabilidad de garantizar el derecho a la educación de la niñez en situación de migración. Por ello, entre otras acciones, es prioritario fortalecer la práctica de los docentes que en el día a día trabajan en sus aulas con niñez migrante, mediante una formación que atienda los retos y desafíos que enfrentan en el desarrollo de su práctica.

 

Maestras y maestros que atienden a niñas y niños en situación de migración en servicios educativos generales, destacan como un reto que sus alumnos se adapten rápidamente a la convivencia y a las formas de trabajo en el aula, como condición necesaria para el aprendizaje. A su vez argumentan que su lengua y cultura dificultan este proceso. 

 

Al respecto, es necesario repensar las concepciones existentes en torno de la niñez migrante, muchas veces estigmatizantes, y avanzar hacia una práctica que valore el potencial pedagógico que representan los conocimientos, saberes y experiencias de las niñas y niños migrantes, a fin de utilizarlo en beneficio de todos los estudiantes del aula y la escuela (Rodríguez y Hernández, 2018; Gómez, 2020).

 

Por ejemplo, algunos docentes sobre su experiencia en la atención de niñas y niños migrantes comentan:

 

 

"En algunos casos la enseñanza y educación que traen de escuelas anteriores no son similares a la forma en que [yo] trabajo y les cuesta adaptarse"


Docente multigrado, Baja California
Baja California


 

"... hay dificultades de [estos] alumnos para expresarse,
tanto verbalmente como de manera escrita"


Docente de Multigrado
Baja California Sur


 

  

 

“Cuando llegó a la escuela apenas hablaba y tenía muchas dificultades para comunicarse y hacer amigos. Ahora ya es muy hablantina. Ayer le pedí que nos contara un cuento mientras veía las imágenes de un libro y enseguida nos relató una historia. No sólo hablaba de las imágenes que miraba, pues agregaba muchas cosas:   ¿Dónde viste todo esto? , le pregunté, y ella me dijo: Pues en los lugares donde he estado . Me da mucho gusto: ella habla, convive y puede contarnos todo lo que ha visto.”


Fuente: DGEI, 2012b: 207-208.
Docente de preescolar, Tabasco


 

 

 

Reconocer la diversidad en lugar de verla como un obstáculo, es clave para transformar la visión homogénea de la enseñanza y el aprendizaje. La práctica docente debe centrarse en promover la inclusión, lo cual supone reconocer las barreras de aprendizaje y participación que enfrentan las niñas y niños en el aula y en la escuela, entender sus circunstancias de vida y singularidades, así como ser sensibles a sus fragilidades.

 

Por otra parte, implica reconocerles y acogerles sin condiciones y comprender que todos los estudiantes pueden enriquecer sus aprendizajes gracias al bagaje y diversidad cultural de las niñas y niños migrantes. Desde esta perspectiva, los docentes pueden tomar decisiones sobre su práctica para favorecer procesos de inclusión a partir de:

 

Conocer a los estudiantes: ¿quiénes son? ¿de dónde vienen? ¿qué experiencias tienen? ¿cómo son sus días?

Identificar posibles barreras para el aprendizaje y participación: diferencias de lengua, edad o condición social.

Promover la participación de las niñas y niños migrantes para aprovechar sus saberes y experiencias.

Sensibilizar a las y los estudiantes del grupo para respetar y acoger a nuevos integrantes en el aula. 

  

 

Es de vital importancia establecer espacios para que, desde la formación continua de docentes, se cuestionen, analicen y reflexionen las concepciones y prácticas bajo las que se atiende a las niñas y niños en situación de migración, para avanzar en la construcción de escuelas inclusivas y equitativas.

 

 

¡Participa!

 

En la intervención formativa “Repensar a la niñez migrante para fortalecer la práctica docente”.

Acércate al área de formación continua de tu entidad federativa. Solicita información.

 

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Para saber más

 

DGDCCyAI. Dirección General de Desarrollo Curricular, Capacitación y Acompañamiento Institucional (2017, 11 de marzo). El enfoque: Diversidad y Aulas Heterogéneas [video]. YouTube.  https://www.youtube.com/watch?v=n1xzmg1_I4Y 

Gómez, D. (2020). La acogida de la vulnerabilidad de la infancia: la responsabilidad ética-pedagógica en la escuela. Educação e Pesquisa, 46: 1-18.   https://www.scielo.br/j/ep/a/SVmwMY6vFssTpTznxF5RJXp/?lang=es 

Mejoredu (2023). Repensar a la niñez migrante para fortalecer la práctica docente. Intervención formativa. Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación.  https://www.mejoredu.gob.mx/images/programa-formacion-docente/docenteseb/eb_intervencion_ninez_migrante.pdf 

Mejoredu (2023). Repensar a la niñez migrante. Cruzando fronteras en mi práctica docente. Bitácora de trabajo. Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación.  https://www.mejoredu.gob.mx/images/programa-formacion-docente/docenteseb/eb_bitacora_ninez_migrante.pdf 

Rodríguez, C. y Rojas, T. (2018). Migración interna, infancia y derecho a la educación. Aproximaciones interdisciplinarias, actores y propuestas de políticas públicas. Universidad Iberoamericana.